Los
límites del perdón (Celia Ortiz Matilla 1º Bach D)
Resumen
Esta historia habla sobre la vida de un hombre judío,
llamado Simón. Él era un prisionero que vivía en un campo de
concentración situado en Lemberg. Simón nos narra las condiciones nefastas que pasa en el campo de concentración, presenciando
muertes, humillaciones, burlas...
Un grupo de la SS nombró a cincuenta judíos para
que abandonaran el campo de concentración, y pusieron rumbo a otro
nuevo hogar; uno de esos cincuenta judíos era Simón, un arquitecto
que estudió en el Instituto Tecnológico, donde más tarde pasó a
residir allí. De camino al Instituto Tecnológico, Simón se quedó
impactado al ver que cada tumba de los soldados tenía un girasol en
medio. Desilusionado piensa que él no podría acabar como los
soldados de la SS.
Al llegar al hospital una enfermera le llamó y le
preguntó si le podía acompañar. Le dio paso a una de las
habitaciones del hospital, donde se encontraba un antiguo Nazi herido
por la Segunda Guerra Mundial, cerca de su lecho de muerte. El
moribundo se llamaba Karl. Le pide que escuche sus acontecimientos
más importantes de su vida y el porqué ahora se encuentra en esa
situación. Karl comienza a a relatar su historia y sus terribles
asesinatos. El asesinato que mas le impactó y perjudicó moralmente
fue desempeñado a una familia judía. Karl le pidió que le
perdonara para morir en paz. Simón después de un largo proceso de
duda, decidió abandonar la habitación silenciosamente.
Cuando llegó al trabajo le contó a sus amigos lo
que le había ocurrido,y su respuesta ante la situación vivida. Sus
amigos pensaban de la misma manera que él.
Pasado el tiempo quedó libre y no había olvidado
esta historia. Buscó a la familia de karl. Tras haber hablado con la anciana madre de Karl se dio cuenta que era una familia humilde y
decidió no contarle la historia a nadie. Este libro plantea al
lector la duda si él hubiera perdonado o no a karl.
Opinión
personal
Desde mi punto de vista moral pienso que es una
situación bastante difícil de perdonar. Si yo fuera el protagonista
hubiera hecho lo mismo. Pensando también que Karl se hiciera miembro
de la SS por miles de motivos desconocidos, sin haberse criado en una
familia de malos modales, ni violenta.
Terence Prittie
Terence piensa que le podía haber pedido la
confesión y el perdón a un sacerdote de su misma religión. Explica
que si él hubiera sido judío, se habría sentido ofendido por las
súplicas de la SS.
Él cree que ni karl, ni ningun soldado de la SS se merece el perdón por todo
el daño que ha causado a las familias judías y todas las muertes
innecesarias que ha realizado.
Terence Prittie piensa que Simón podría haber
actuado de otra manera pero reconoce que no tiene conocimientos
filosóficos para reaccionar de tal manera, aun así reaccionó de
manera lógica y sensible.
Mi opinión
sobre Terence Prittie
Comparto la mayoría de los pensamientos de Terence;
pienso que un soldado de la SS no debería pedir perdón a un judío,
para así morir en paz. El pensamiento que no comparto con el autor
es el pedir perdón a un sacerdote de su misma religión. Si el
soldado ha causado muertes y sufrimientos innecesarios a familias
judías, debería de atenerse con sus consecuencias a la hora de su
muerte, y no arrepentirse de unos hechos que ha sido decidido por
cuenta propia, sin que nadie lo obligue a hacerlo.
En mi opinión yo no perdonaría a un soldado de la
SS después de todo el daño causado. Hay cosas y situaciones en las
que se puede perdonar, pero el perdón de un asesino no debería de
otorgarse.
El arrepentimiento y el perdón se muestra o se otorga a las personas que han sido afectadas por dichos actos. En este caso si Karl no ha hecho ningún mal a un sacerdote ni a nadie relacionado con la iglesia no tiene porque pedirle perdón. Entiendo que Karl se sincerase con Simón ya que de alguna manera, Simón también a sufrido los maltratos de los soldados, podía saber mejor si perdonarlo o no. En todo caso sigo pensado igual que el autor, él no ha sido el atacado ni afectado por el soldado así que el único que tiene derecho de perdonarlo o no son las víctimas.
ResponderEliminarSusana Moriana Elena
Estoy de acuerdo con lo que piensa Celia sobre esta historia. Ya que esta situación es difícil de perdonar porque hay vidas de personas de por medio. Respecto a su autor pienso que quien le debería de perdonar son las familias de las victimas y no nadie de la iglesia ni cualquier otro judío que conozcas en cualquier momento.
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